Durante 13 años, Oziel García ha sido silenciosamente uno de los partidarios más firmes de Dame 5, la campaña de recaudación de fondos interna de IDEA que brinda apoyo financiero vital a los estudiantes de IDEA. Como el donante más importante y de mayor duración, las contribuciones de Oziel han dejado una marca indeleble, no solo en dólares, sino también en las oportunidades que ha ayudado a crear para los estudiantes que enfrentan los mismos desafíos que él enfrentó una vez.
“Soy un trabajador migrante de tercera generación y un graduado universitario de primera generación”, comparte Oziel, reflexionando sobre su experiencia. “Cualquier ayuda financiera, sin importar cuán pequeña sea, es de gran ayuda”. Para Oziel, no son solo palabras, es una experiencia vivida profundamente. Recuerda el peso de necesitar apoyo financiero para completar su educación, la carga de los préstamos y el deseo de simplemente concentrarse en aprender. Y es por eso que dona. “Siento que si puedo ayudar, debo hacerlo”.
Esta creencia sencilla pero profunda de ayudar a los demás es la razón principal por la que Oziel ha continuado brindando su apoyo durante más de una década. Al vivir y enseñar en la misma comunidad, Oziel ve de primera mano los frutos de su generosidad. “Es gratificante”, dice con orgullo sereno, “ver a exalumnos trabajando para alcanzar sus metas, sabiendo que de alguna manera, los he ayudado a lograrlo”. Su compromiso es más que financiero, es profundamente personal.
Hubo un momento en particular que se destacó para Oziel. Ver a un estudiante de último año al que enseñó cuando estaba en sexto grado recibir un premio. Dame 5 La beca le hizo sentir que todo había vuelto a su cauce. “Fue una sensación increíble”, recuerda, “ser parte de ese momento, sabiendo que había jugado un pequeño papel en su éxito”.
Para Oziel, dar no se trata solo de lo que ves hoy, sino de lo que estás plantando para el futuro. “Dar es como invertir en el futuro”, dice. “A veces ves el cambio de inmediato, pero la mayoría de las veces no. Sin embargo, para la persona que recibe esa ayuda, puede cambiarle la vida”. Y esa es la esperanza que tiene para Give Me 5, que seguirá ayudando a más estudiantes a avanzar sin estrés financiero, permitiéndoles centrarse en lo que más importa: su educación y sus sueños.
El mensaje de Oziel a sus compañeros es sincero y claro: “Si pueden dar, deben hacerlo. Inviertan en el futuro de alguien”.
Su visión es que cada miembro del personal que pueda sumarse a la causa lo haga, transformando juntos la vida de los estudiantes de maneras grandes y pequeñas. Porque al final del día, no se trata de la cantidad, se trata del poder colectivo de una comunidad que se une para ayudar a sus futuros líderes.
Como nos recuerda la historia de Oziel, el impacto de Dame 5 Va mucho más allá de lo inmediato. Se trata de construir un legado que cambie vidas, un académico a la vez.